El gran mundo de la ilusión

El gran mundo de la ilusión. Para mí lo ha sido, y lo sigue siendo.

En las Navidades de 2004-2005 cogí una revista de juguetes en El Corte Inglés de Oviedo. Quizá la revista de juguetes más bonita que haya existido. Por lo menos para mí. 

La portada tenía algo especial. Me podía quedar absorta dos horas observando aquel maravilloso dibujo, éste dibujo: 

Vemos en la portada que hay tres niños leyendo la misma revista que leemos nosotros, es decir, vemos un dibujo donde hay tres niños leyendo una revista donde aparecen esos mismos tres niños leyendo la misma revista..., así hasta el infinito.

Unos años más tarde, he leído el libro de matemáticas recreativas ¡Ajá! Paradojas que hacen pensar de Martin Gardner,  que es muy divertido y muy bueno para perder el miedo a las matemáticas. A mí me gustó mucho.  Con  éste libro he aprendido muchas cosas. Es  dónde yo he leído por primera vez algo sobre el concepto regresión infinita. Con el fin de ilustrar un poco en qué consiste, en el libro viene un pequeño poema de Jonathan Swift (el autor de Los viajes de Gulliver) adaptado por el matemático Augustus de Morgan (conocido por sus Leyes de De Morgan). 

El poema dice así:

        Las pulgas grandes

        a lomos cargan pulguitas, 

        quienes las pican.

        Y las pulguitas

        transportan a otras menores,

        ad infinitum.

        Y las más grandes van a su vez

        a cuestas de otras mayores, 

        y éstas

        aún cabalgan sobre otras,

        y así una vez y otra.

A partir de estos versos he conseguido poner un nombre al fenómeno que yo (y ,seguramente, todos los niños) observaba en la portada de la revista. También he conseguido poner nombre a lo que encierra la frase que todos conocemos:

¿Qué fue antes: el huevo o la gallina?

Algo parecido ocurre cuando colocamos un espejo frente a otro espejo.


Y  también cuando grabamos una pantalla de un ordenador mostrando lo que la cámara está grabando, es decir, la pantalla misma.



Quiero  terminar esta entrada con música. Os dejo una de mis obras contemporáneas  favoritas. Es un poco melancólica y meditativa. Se trata, como no podía ser de otra manera, de  Spiegel im Spiegel (espejo en espejo) del compositor estonio Arvo Pärt.


Comentarios

  1. ¡Hola Ana! Qué entrada más interesante, sin duda seguiré tu recomendación del libro de Martin Gardner para perder un poquito el respeto a las matemáticas. ¡Me encanta tu blog!

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  2. ¡Muchas gracias, Débora! Me alegra que te guste mi blog y que te parezca interesante esta entrada. Los libros de Martin Gardner son muy divertidos y bastante sencillos.

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  3. ¡Muy interesante la entrada! Siempre me quedaba embelesada de pequeña observando los infinitos espejos en el centro comercial, confusa y sin entender nada. Ojalá saber por aquel entonces de Martin Gardner... Aún así, me alegro de poder al fin ponerle nombre al fenómeno después de tantos años :).

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    1. ¡Muchas gracias, Emma! Siento haber contestado con tanto retraso. Los infinitos espejos son para perderse en ellos. Lee libros de Martin Gardner. ¡Te engancharán las matemáticas! Y también te recomiendo a Sam Loyd, tiene acertijos muy interesantes.

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  4. Por cierto, la música es maravillosa. Sin duda se ha ganado rápido un puesto en mi top 5 de canciones favoritas de todos los tiempos. Ideal para leer y meditar con ella de fondo.

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    1. Me alegra mucho que te guste la música. Creo que ya te había hablado de Arvo Pärt una vez, de Fur Alina.

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